¿Qué calificaciones tienen los políticos estadounidenses difamados para hablar de "Red Limpia"?

El 5 de agosto, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, anunció el programa llamado Clean Network (o Red Limpia) por motivos de la denominada "seguridad nacional", con la intención de excluir la influencia de las empresas chinas en cinco aspectos: operadores, tiendas de aplicaciones, aplicaciones, servicios en la nube y cables de red. Al día siguiente, el líder estadounidense firmó una orden ejecutiva que imponía restricciones a las empresas de redes sociales chinas.

En pleno siglo XXI, Pompeo y sus semejantes intentan derribar el "telón de acero técnico", excluir a China del mundo de la información interconectada y promover un "desacoplamiento" integral. Su intención es extremadamente siniestra y ha sido ampliamente condenada.

Aunque algunos locos políticos en Washington presentaron cargos arbitrarios afirmando que las empresas chinas de tecnología de la información "pusieron en peligro" la seguridad nacional de los Estados Unidos, de hecho, no pudieron proporcionar ninguna evidencia verdadera más allá que repetir sus mentiras. El plan de la llamada "Red Limpia" que Pompeo se esfuerza por promover no es clara en sí mismo, en realidad es una sucia persecución política contra las empresas chinas de tecnología e información.

Por el contrario, son precisamente los Estados Unidos los que han alcanzado su punto máximo y han extendido sus "manos negras" cibernéticas a todas partes del mundo, incluidos sus aliados.

Desde 2013, cuando estuvo expuesto a monitorear las llamadas telefónicas privadas de la canciller alemana Merkel durante más de una década, hasta el lanzamiento de un ciberataque contra Rusia en 2018, lo que provocó la paralización de la red de la Agencia Federal de Noticias de Rusia durante varios días, y luego la firma del presidente de EE. UU. en septiembre del mismo año por la primera "estrategia cibernética" que autoriza al ejército estadounidense a desplegar libremente armas cibernéticas avanzadas y llevar a cabo operaciones cibernéticas ofensivas, acción que se mantiene durante 15 años, una gran cantidad de hechos han demostrado que Estados Unidos es la mano negra más grande en ataques cibernéticos y la mayor amenaza para la seguridad cibernética mundial.

Pompeo y sus similares intentan dividir artificialmente la importante base tecnológica de la interconexión humana e instigaron arbitrariamente la "guerra fría técnica", pero en realidad hay múltiples secretos detrás de ella.

En primer lugar, para mantener el monopolio de Estados Unidos en el campo de la alta tecnología, Pompeo y sus afines no dudan en arrancar la tapa de la llamada "libre competencia", mostrando su rostro brutal. Esta acción no solo viola los principios del mercado y las normas económicas y comerciales internacionalmente, sino que también amenaza seriamente la seguridad de la cadena industrial y de suministro de todo el mundo, creando enormes obstáculos para el progreso científico y tecnológico humano, además del desarrollo económico.

En segundo lugar, en los Estados Unidos, el fracaso de la prevención y el control de la epidemia interna，la ola de protestas desencadenadas por la discriminación racial y los datos económicos cada vez más deteriorados son un triple ataque contra el equipo gobernante de Washington que busca alcanzar la reelección. En este contexto, Pompeo y sus similares consideran los alocados comentarios contra China como una "gota que salva vidas" para continuar con su estrategia política.

En tercer lugar, como "fósil viviente de la Guerra Fría" que pretenden instalar en pleno siglo XXI, Pompeo tiene una fuerte obsesión contra China en su corazón. Sigue haciendo movimientos para reprimir al gigante asiático para evitar su avance y evolución. También tiene un plan oscuro para aprovechar el fuego y allanar el camino para mayores derechos al mostrar su firmeza contra China.

Sin embargo, en la globalización altamente desarrollada de hoy, el intento de Pompeo de sofocar a las empresas chinas de tecnología de la información está condenado al fracaso.En el campo de la tecnología de la información, la posibilidad de que Estados Unidos pueda excluir a las empresas chinas del escenario mundial depende en primer lugar de que si corresponde con las leyes de la economía.

Por un lado, la industria de la información y las comunicaciones de China se está desarrollando rápidamente, y el nivel de I + D de China en el campo 5G ha entrado en los primeros puestos del mundo. Entre las diez principales empresas de Internet del mundo por capitalización de mercado, las empresas chinas tienen tres asientos exclusivos. Durante mucho tiempo, China y otros países han llevado a cabo una cooperación pragmática y eficiente en la construcción de redes de comunicación, la seguridad y la fiabilidad han sido probadas durante mucho tiempo por el mercado.

Por otro lado, el enorme mercado de China ha proporcionado un terreno amplio para el desarrollo de la industria de la tecnología de la información en varios países, creando enormes oportunidades comerciales para el beneficio mutuo. ¿Qué empresa está dispuesta a ceder un mercado y unas oportunidades comerciales tan grandes?

Desde la perspectiva de la opinión pública, el gobierno de los EE. UU. con frecuencia usa medios administrativos para "golpear y matar" a empresas de otros países. Esto es para anteponer sus propios intereses por encima de los principios del mercado y las normas internacionales. Este medio ha dañado los derechos e intereses de la mayoría de los usuarios y compañías estadounidenses, e incluso se encuentra ya en el lado opuesto del progreso tecnológico mundial.

En el mundo actual, la tendencia de apertura y conectividad es imparable. Aunque Pompeo, el "peor secretario de Estado de la historia", ha calculado tanto, su conspiración política y la ha mostrado a todo el mundo. El plan de la llamada "Red Limpia" es solo una broma y una mancha más.